Abrimos el telón del microteatro de la mano del director y guionista Xavier Miralles
Inéditad te invita a que te adentres en el sorprendente mundo del microteatro de la mano de este joven director y guionista que lo está petando con su última obra en cartel en el espacio Microteatre Barcelona. Licenciado en Comunicación Audiovisual por la Universitat Autònoma de Barcelona y Máster en Dirección Cinematográfica en la ESCAC, hoy en el blog Inéditad entrevista a Xavier Miralles, autor de “Los Chicos Boreales”.
I.- Xavier, empezamos con una pregunta a priori sencilla pero que quizá su respuesta pueda resultar complicada. ¿Cómo se definiría profesionalmente Xavier Miralles? ¿Y personalmente?
X.M.- Creo que ambas van muy ligadas, porque precisamente lo que intento aplicar a mi profesión es justamente lo que caracteriza mi vida personal. Siempre intento escribir desde los problemas que me ocupan en ese momento, las inquietudes que tengo o las vivencias más significativas. De hecho, la mayoría de las veces uso mis historias como canal para quitarme de encima aquello que quiero purgar para que mi vida esté tranquila. Soy muy sentimental y me gusta hacer todas las cosas con pasión, sin eso creo que nada tiene sentido. También soy metódico y disciplinado, estricto con el trabajo. En la parte personal intento renovarme siempre, aprendiendo de la gente que me rodea y dejando puertas abiertas para ver qué partes de mí me quedan por conocer. Esa es la única forma de seguir creciendo en esta profesión: no ser consciente de todo lo que eres realmente.
I.- ¿En qué momento te sentiste seducido por las artes escénicas?
X.M.- Siempre me gustó llevar el mando en las funciones que hacíamos en el colegio. Me gustaba disfrazarme y hacer el loco de todas las formas posibles. También escribía cuentos sin parar y se los contaba a mis compañeros y a las profesoras. Con el tiempo se transformó en pasión por el cine. Podría decir que el punto clave fue en Bachillerato, cuando decidí hacer mi trabajo final sobre la interculturalidad a través del cine. Ahí decidí que yo también quería contar historias.
«una de las mayores satisfacciones de este proceso está siendo ver cómo gente de diferentes sexos, orientaciones sexuales y edades conectan con los personajes por igual»
I.- ¿Cómo comenzó tu relación con Microteatre Barcelona?
X.M.- Cuando en enero de 2016 seleccionaron mi obra Salsa Golf. No me atrevía a presentar nada, pues le tengo mucho respeto al teatro, pero un amigo actor no paró de insistirme y finalmente me animé. Dado que el formato comparte mucho con el mundo del cortometraje, por su dimensión y cercanía, pensé que podría defenderlo. Y fíjate, de ahí a estar estrenando mi undécima obra en Microteatre.
I.- ¿Cómo nació el proyecto de “Los Chicos Boreales”?
X.M.- Pues realmente fue durante una sola noche. Quería hablar sobre el dolor que sentimos cuando alguien no nos quiere y, a la vez, entender a la otra parte, al causante de este dolor. Ambos sufren en una situación así y eso me interesaba. Me puse a escribir sobre Javi y Marc y no pude parar hasta terminarla.
«soy muy sentimental y me gusta hacer todas las cosas con pasión, sin eso creo que nada tiene sentido»
I.- ¿Qué sensaciones te gustaría despertar entre los espectadores de “Los Chicos Boreales”?
X.M.- Identificación. Creo que todo el mundo puede sentirse parte de la historia, pues todos hemos estado en uno de los dos lugares o, incluso, en ambos. Es un regalo ver que esto le pasa a la gente cuando ve la obra. De hecho, una de las mayores satisfacciones de este proceso está siendo ver cómo gente de diferentes sexos, orientaciones sexuales y edades conectan con los personajes por igual. Al final, el amor no entiende de nada más que de eso, de amor.
I.- Si no me equivoco, con “Los Chicos Boreales” se cumple el undécimo estreno de una de tus obras en Microteatre Barcelona. ¿Qué ventajas consideras que ofrece representar obras de 15 minutos para 15 espectadores en 15 m2 respecto a lo que podríamos llamar teatro más convencional?
X.M.- La más importante es la cercanía, tanto en el espacio como el tiempo. En esos menos de 15 m2 puedes lograr meter a la gente dentro de un espacio en el que tienen los actores a menos de un metro. Si consigues hacer lo mismo con el poco tiempo que tienes, la sensación es de estar viviendo junto a ellos una porción de realidad. Eso no lo permite ningún otro formato. Puedes verles casi transparentemente, olerlos y oír sus voces sin que tengan que proyectarlas más de la cuenta. Lo que ves es tan real que, a veces, sientes que estás invadiendo un espacio de intimidad.
I.- ¿Hasta qué fecha podremos disfrutar de “Los Chicos Boreales?
X.M.- Estuvimos programados durante el mes de marzo y gracias a la buena acogida hemos prorrogado hasta el 25 de mayo. Quedan ya muy pocos días.
«lo que ves es tan real que, a veces, sientes que estás invadiendo un espacio de intimidad»
I.- ¿Qué pueden hacer las artes escénicas por la diversidad de identidad sexual y de género?
X.M.- El arte, en general, es una arma en positivo que tiene la capacidad de mostrar muchas más cosas de las que podemos ver en nuestro día a día. La visibilidad es para mí lo más importante que pueden aportar las artes escénicas. Llevamos cientos de años con historias de personajes heterosexuales y los datos de taquilla en el cine, por ejemplo, reflejan que una película con personajes homosexuales no puede alcanzar los mismos datos que las películas con personajes heterosexuales. Los datos vienen dados porque el público heterosexual no se identifica, habitualmente, con una historia protagonizada por personajes LGTB. Yo llevo toda mi vida viendo esas películas de heterosexuales, me he emocionado con ellas y he vivido sus personajes. Así que ahora es el momento de que todo el mundo se pueda identificar con las nuestras. Con las historias de personajes del colectivo LGTB. Es por eso que voy a seguir escribiendo sobre ellos, sobre esos personajes que, gracias al arte, cada día están un poco más presentes.
I.- Estoy convencido, y aprovecho el símil con el hecho de parir a una criatura, de que cada vez que finalizas un trabajo lo llegas a apreciar probablemente con el mismo cariño que al resto de tus anteriores obras; sin embargo, ¿te atreverías a decirme de cuál de ellas te sientes especialmente orgulloso hasta la fecha y por qué?
X.M.- Normalmente la gente no se moja con este tipo de preguntas, pero a mí me gusta mucho hacerlo. En el campo cinematográfico he dirigido muchos cortometrajes e incluso un largometraje. A pesar de tener algunos muy recientes de los que estoy muy contento, el que es más especial es Letargo, que se puede ver en Youtube. Una historia muy personal y que supuso un punto importante en mi desarrollo. Respecto al teatro, a pesar de tener mucho cariño a todas las piezas, destaco Los Chicos Boreales, por haber supuesto la fusión entre ser una pieza muy íntima y haber llegado a tantísimos espectadores. La experiencia está siendo impresionante.
I.- ¿Tienes algún referente de la escena teatral?
X.M.- Provengo del mundo cinematográfico, de donde he podido sacar más influencias. La verdad es que siempre me he guiado por lo que a mí me nacía hacer, sin querer tomar referentes. Al inicio de mi carrera estaba muy marcado por referentes del cine de terror de los años 90, pero mis temáticas fueron derivando poco a poco a otros géneros como la comedia y el drama. Ahora mismo creo que mezclo influencias del cine americano en términos de realización y el contenido se asemeja más a las piezas intimistas del cine europeo. Creo que Woody Allen es un gran referente de comedia, pero en el drama debo decir que sigo mi instinto propio.
«yo llevo toda mi vida viendo esas películas de heterosexuales, me he emocionado con ellas y he vivido sus personajes. Así que ahora es el momento de que todo el mundo se pueda identificar con las nuestras»
I.- ¿Qué pieza del teatro universal sería tu preferida?
X.M.- ¿Puedo contestar en cine? Amarcord, de Federico Fellini, es mi película favorita. Así como también La Dolce Vita. Fellini es lo más.
I.- Para terminar, ¿qué planes profesionales (y que se puedan contar) tienes próximamente?
X.M.- Me meto en demasiados líos. Llevo ya mucho tiempo tirando adelante dos proyectos de largometraje, a la espera de ver cuál de los dos ve la luz primero. Por otra parte he terminado de rodar mi último cortometraje, titulado Transform(arte), que empieza su edición próximamente. En teatro empezaré a desarrollar el guión de mi primera obra larga que, aunque no quiero contar mucho, tiene mucho que ver con Los Chicos Boreales. Y, por último, estoy en pleno proceso de escritura de mi primera novela. Es posible que con tantas locuras a las que me apunto termine por morir de cansancio y no termine ninguna. ¡Crucemos los dedos!
Este fin de semana concluye la representación de “Los Chicos Boreales” en Microteatre Barcelona. Si estás en la Ciudad Condal no pierdas la ocasión de disfrutar de 15 minutos de pura emoción a un precio que ni te lo creerás. Rompe el mito de que ir al teatro es caro con una fórmula que sin duda alguna te va a enganchar.
Últimas funciones desde el jueves 23 de mayo al domingo 26. Consulta los horarios AQUÍ.
Gracias Xavier por conceder a Inéditad esta entrevista. Te auguramos muchísimos éxitos porque el talento está claro que lo llevas contigo.
Texto: Inéditad
Imágenes cedidas por Xavier Miralles.